Un niño que no para de correr y montar en bicicleta usada como simbolismo de su obsesión por buscar un modelo a seguir, hiperactivo para desfogar la rabia de su mundo desestructurado. Le da gran realismo estar grabada cámara al hombro y siguiendo de cerca al niño que realiza una genial interpretación. Desde el principio la fuerza de las reacciones y los sentimientos, transmiten tensiones y emoción. Un drama social tratado con naturalidad.
0 Pincha este texto para comentarios.:
Publicar un comentario