El día de Reyes hemos dado un paseito por la orilla y parece que los perris estaban emocionados porque ellos solitos se han atrevido a darse el primer bañito. Quizás les han traído los magos de oriente el perder el miedo al agua, la orilla siempre les ha gustado y la disfrutan, pero el baño siempre les ha dado respeto, hasta hoy, día mágico...
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