sábado, 7 de enero de 2012

Primer percance


Con las ganas que teníamos de asomarnos a la orilla nos adentramos en el prao sin pensarlo, después de lo que había llovido, el coche patinaba en el barro y la hierba y tuvo que venir un tractor a remolcarlo para que pudieramos salir de ese percance...

0 Pincha este texto para comentarios.:

Publicar un comentario

ir arriba